HITZAK / PALABRAS

SINOPSIS
Tres mujeres y un hombre...........y un niño.
MUJER JÓVEN. Recién casada con el hombre que ama. Espejo de la felicidad.
MUJER MADURA. Hace tiempo que se casó con el hombre que amaba. En continuo conflicto. Espejo de la infelicidad.
MUJER MAYOR. Ha olvidado si alguna vez quiso a algún hombre. Espejo de la locura. (pero consciente que al otro lado del espejo puede ser libre y feliz).
La MUJER JOVEN se ha casado con el hombre que ama y desea, con la esperanza de ser eternamente feliz. La MUJER MADURA al mirarla recuerda esos años de recién casada, hasta que algo empezó a romperse en su relación. La MUJER MAYOR, quedó rota del todo cuando perdió a la persona que más quería en este mundo. Desde entonces, no da consejos a nadie. Vive con su hijo, intentando alcanzar estrellas fugaces.
La historia de esta tragedia, no ocurre en un solo día, sino día tras día, poco a poco. La MUJER JÓVEN es feliz en casa, feliz en el trabajo, feliz al enterarse que será mama; y sin embargo, algo está cambiando. Su marido ya no le habla en susurros con aquellas palabras tan bonitas; aquellas palabras que la enamoraron locamente se han convertido en otra cosa: en palabras hirientes. Y sufre, sufre porque siente que él ya no la quiere como antes. Y aunque la quisiera, necesita del susurro de sus palabras. Palabras susurradas. Entre tanto, EL HOMBRE también esta dolido. Y se defiende siendo hiriente con ella.
La MUJER MADURA intenta convencer a La MUJER JÓVEN de que el sufrimiento que uno vive, no da derecho a hacer sufrir a los demás. Le quiere decir, que a ella también le ocurrió lo mismo. Que no acepte las palabras que hieren, de lo contrario, abrirá las puertas a la tragedia. Se lo dice por su propia experiencia. Debe de aprender a decir, basta! Lo que ella no supo hacer en su día. Pero, la MUJER JÓVEN, reclama vivir su vida, al fin y al cabo, el hombre actúa sólo con palabras. Palabras que también sonaban en boca de la MUJER MADURA, hasta que un día decidió que era mejor callarse. Porque así como las palabras con palabras, suenan hermosas. Las palabras contra palabras, pueden llegar a ser mortales.
Tres mujeres y un hombre.......y un niño. Tres mujeres que pueden ser una misma. Tres mujeres que son la misma. Que palabra a palabra envejecen; palabra a palabra pasan de la felicidad a la infelicidad y de la infelicidad a la locura; palabra a palabra, intuyendo la tragedia; palabra a palabra, intentando reunir la fuerza para poder entender y decidir que hacer; palabra a palabra…